Consideraciones básicas sobre el Ajo

El ajo es un producto agrícola de gran demanda a escala mundial, pues sus alcances y beneficios van desde la gastronomía hasta la medicina natural. Es un ingrediente infaltable en muchos hogares y en el caso específico de los países de la Unión Europea, es España el país que más producción de este rubro registra anualmente.

De acuerdo a estudios de comercio realizados, el ajo aunque es producido en diversos países del mundo, España se ubica entre el quinto y el sexto lugar en producción mundial.

En España la producción de ajo destaca en comunidades autónomas como Castilla La Mancha, específicamente en las localidades de Alcarria, La Mancha Alta, la Mancha Baja, Manchuelas, así como las de las provincias de Albacete, Cuenca, Ciudad Real y Toledo, siendo preponderante la producción en Centro de Albacete.

También en la provincia de Badajoz, específicamente en Aceuchal se dedican al cultivo y la venta de ajo tanto en su estado natural, pelado, en cabeza y  pastas.

TIPOS DE AJO PRODUCIDOS EN ESPAÑA

España por ocupar el primer lugar en cuanto a países de la Unión Europea en el cultivo de ajo, posee amplia experiencia en cuanto a las variedades de este rubro. Dentro de las especies que podemos encontrar en este país están:

Ajo morado: es una variedad bastante comercial, posee una cabeza mediana que puede  albergar hasta 10 dientes, una de las características de esta especie de ajo es que por fuera su capa es blanca, pero en el interior las capas que recubren los dientes son de un intenso color morado.

Este tipo de ajo tiene un color un poco más intenso que otras variedades y esto se debe a su alto valor en alicina.

Ajo blanco: esta es la variedad más común que se produce en diversos países, posee una cabeza bastante grande que puede albergar hasta 12 dientes, todas sus capas son completamente blancas y posee un sabor un tanto picante.

PROPIEDADES CURATIVAS DEL AJO

La alta demanda que registra la venta y por ende el cultivo de ajo deriva en los múltiples beneficios que ofrece, pues  además de ser un condimento de gran sabor y aporte nutricional en el arte culinario, posee propiedades curativas como:

El alto contenido en alicina lo convierte en un potente bactericida o antibiótico, así fue demostrado por un médico suizo, quien además recibió el Premio Nóbe, Arthur Stoll; quien destacó las propiedades del ajo para contrarrestar y prevenir infecciones.

Además sus usos alcanzan la propiedad de un depurativo de toxinas, por lo que es ideal para mantener en buen estado el sistema cardiovascular. En caso de una intoxicación muchos médicos naturistas recomiendan el uso de ajo como antialérgico.

Hay quienes  además atribuyen al ajo la posibilidad de prevenir peligrosas enfermedades como el cáncer tanto en el estómago, como en el área intestinal. Además cuenta con propiedades cicatrizantes, también funge como estimulador cerebral que ayuda a combatir el estrés e incluso la depresión.

Por todo ello, países como España continúan perfeccionando las técnicas de cultivo a fin de ir incrementando la producción de este rubro natural que es solicitado en casi todos los hogares europeos.